Friday, March 25, 2016


DOS HERRAMIENTAS CONTRA EL MARTILLO DE MASLOW


L.T.O. Olman Orozco Vargas

Es interesante saber que aun los seres humanos no hemos logrado una definición exacta de lo que es el conocimiento, por lo cual, tendemos a considerarlo como la información que adquirimos de diferentes formas (educación, experiencia, practica en referencia con nuestro ambiente); existiendo también los diversos contenidos de tipo intelectual que nos ayudan a un entendimiento de la información a diferentes preguntas que podemos llegar a realizarnos.

Nuestro conocimiento nos brinda el entendimiento de la percepción de los sentidos, como una base para lograr manipular diferentes elementos, materiales y hasta el mismo ambiente en pro de la satisfacción de nuestras necesidades. 

“La adquisición de cualquier conocimiento es siempre útil al intelecto, que sabrá descartar lo malo y conservar lo bueno.” -Leonardo Da Vinci-

Para un buen discernimiento, el conocimiento necesita acompañarse del sentido común o crítico, que nos permita juzgar de forma razonable los resultados, objetivos, objetos o situaciones que se nos presentan o creamos.

El conocimiento, la primera herramienta útil en nuestra lista nos permite brindar una atención con resultados reales a la población con discapacidad, evitando principalmente los supuestos del pensamiento mágico (técnicas patito, apoyos no apropiados, intervenciones sin resultados reales).

Nuestra intervención necesita de una segunda herramienta para poder innovarse y evolucionar, hacia nuevos conocimientos que nos permitan aumentar las respuestas ante las necesidades de nuestro usuario.

“La creatividad necesita el apoyo del conocimiento para ser capaz de funcionar mejor”-Massimo Vignelli-.

La creatividad es nuestra capacidad intrínseca de relacionar o generar nuevas ideas, en busca de  soluciones originales; promoviendo la autogeneración de experiencias que enriquecen nuestros conocimientos y por ende mejoran la calidad y cantidad de posibles soluciones que podemos presentar a nuestros usuarios.

En nuestra práctica profesional nuestra meta es el logro de un nivel de independencia mayor al existente antes de ingresar a nuestro servicio, para lograr el alcance de este objetivo necesitamos contar con los conocimientos y la creatividad que nos permitan independientemente de la complejidad de la situación discapacitante, brindarle a la  persona una solución ante las dificultades de su interés en diferentes ámbitos como pueden ser la escuela, el trabajo, la casa, etc.

Al especializarse la terapia ocupacional en el desarrollo de la actividad, la visión de los profesionales necesita centrarse en la búsqueda de soluciones definitivas, que permitan a la persona el desarrollo independiente de las actividades significativas, mediante la implementación de instrumentos, herramientas, equipos, trucos, atajos, métodos o reconfiguraciones en forma creativa, novedosa e inteligente.

La importancia de la selección de las técnicas o apoyos adecuados solo será posible si el profesional cuenta con la variedad de conocimientos que le permitan distinguir las necesidades reales de la persona; evitando en todo momento la tendencia hacia el concepto del martillo de oro.

"Es muy tentador, si sólo tienes un martillo, tratar a todo como si fuera clavo." - Abraham Maslow;  problem solving.

El martillo de oro o martillo de Maslow nos da a entender como entre menos herramientas, conocimientos o habilidades tenga un profesional, mayor será su tendencia a la generalización de sus acciones, aunque estas no sean las adecuadas.

Creatividad y conocimiento, dos herramientas contra el martillo de Maslow. 



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