Herramientas, equipos, apoyos, Terapia Ocupacional 

L.T.O. Olman Orozco Vargas

Al principio de la historia de nuestra especie, el hombre utilizo la fuerza de sus manos para recolectar, reconocer, manipular y sobrevivir a su entorno.

A causa de un progresivo desarrollo de la inteligencia los pre humanos comenzaron a explorar la utilización de piedras, madera y hueso, a forma de herramientas, que le permitieran una ventaja contra sus depredadores y presas.

Con el uso de diferentes objetos en las distintas actividades de la especie humana, dio inicio a un proceso de entendimiento de las diversas características físicas de los elementos utilizados y la combinación de estos, con el fin de obtener herramientas que compensaran las habilidades inexistentes en su cuerpo.

A través de miles de años la búsqueda de métodos de fabricación más eficientes, dio como resultado una mayor satisfacción de las distintas necesidades en el ser humano, para desarrollo de las actividades en que eran      implementadas, como por ejemplo: el cuchillo en las actividades de cocina, caza o combate. 

La utilización de herramientas como elementos de apoyo para el desarrollo de las actividades humanas tiene una importancia que trasciende a las ideologías y culturas, por lo cual podemos observar su utilización a nivel mundial.

Desde los dardos utilizados para la caza por parte de las tribus indígenas del amazonas, hasta los dispositivos con los que nos encontramos leyendo en este momento, la cantidad y evolución de herramientas utilizadas a diario por la humanidad, nos permite realizar actividades que serian imposibles de realizar sin ellas.

Una herramienta es una idea, hecha tangible, que nos permite crear, controlar y manipular, con mayor precisión diferentes elementos reales y virtuales.

La terapia ocupacional es una de las áreas de atención a discapacidad, con mayor potencial para brindar soluciones, a las dificultades que enfrentan las personas con discapacidad en el desarrollo de sus actividades, por contar con los conocimientos que le permiten identificar las necesidades reales de sus usuarios.

Lo que presenta a los profesionales del campo el reto de una mente más analítica, que le permita alejarse de los diferentes misticismos y tendencias del mercado; ofreciendo diferentes apoyos en forma creativa, novedosa e inteligente, para aumentar la independencia, productividad y eficiencia de una persona en situación discapacitante de forma inteligente. 

En vez de solamente estar engrosando cucharas…

Aunque los conceptos de herramienta y  equipo son diferentes, ambos los podemos conceptualizar como apoyos que compensan las habilidades inexistentes en su cuerpo.

El uso de apoyos es una parte de la historia humana que continúa hasta nuestros días, existiendo personas que se ven limitadas en la utilización de estos, a causa de limitantes en el funcionamiento normal de su mente o cuerpo de forma temporal o permanente.

Una persona en una situación discapacitante presenta dificultades en el desarrollo de sus actividades en distintos niveles, dependiendo de la severidad de su condición, haciendo palpable la necesidad de diseños alternativos de las herramientas que normalmente podría utilizar. 

Pedirle a la persona con una discapacidad el desarrollo independiente de una actividad para la cual no haya desarrollado las habilidades necesarias para su ejecución, sería Igual clavar un clavo con los dedos.

Un apoyo no tiene porque truncar  la posibilidad del desarrollo de una habilidad especifica; una habilidad potencialmente presente, siempre se desarrollara con la intervención terapéutica adecuada.

Un apoyo se implementa con el fin de brindarle a la persona una experiencia la cual no tiene posibilidad de conocer por sus limitaciones; facilitando la asimilación de diferentes conocimientos mediante a la práctica y es en este punto donde podemos destacar la importancia de la intervención del terapeuta ocupacional como un desarrollador de apoyos.